¿Te ha pasado alguna vez que tienes una bola de lana que necesitas usar y te gusta mucho? Pero, perdió su forma, no encuentras el principio y con paciencia empiezas a deshacerla hasta devolverle su forma original.
En una experiencia similar nos encontrábamos con mi familia y nuestra empresa. Desde principios del 2020 teníamos el deseo de empezar a hacer mejoras, pero no sabíamos por donde empezar, luego inició la crisis por COVID y llegó la incertidumbre, sin embargo, no descartamos la idea y me apunté al curso La Empresa.
Inicié el curso con deseo de aprender nuevas cosas y así poder trabajar en conjunto con mi familia. La estructura de éste nos permitió ir evaluando nuestras fortalezas y debilidades. Como consecuencia pudimos identificar cuáles eran esas áreas de mejora e inclusive conocer cuales eran aquellas cosas que aún no estábamos haciendo que serían de beneficio para nuestra organización.
Estamos muy agradecidas con todos los coaches por su dedicación al curso y por los conocimientos compartidos. Principalmente por dejarse utilizar por Dios de una manera que trasciende.

Finalizando el mes de abril, luego de un mes y medio donde la vida había cambiado debido a la Pandemia, con poco capital de trabajo ya mi punto de vista, la economía estaba estacionada. Inicie a orar clamando a nuestro Padre que abriera puertas de oportunidad en medio de una cuarentena con un panorama de incertidumbre.
En este curso, me dieron las herramientas que definitivamente hacían falta, la parte financiera, legal, canales de distribución, y lo importante de la propuesta de valor que hacen robusto un proyecto de emprendimiento y sobre todo que va de la mano de lo que la biblia dice en cuanto al dinero y a los negocios.
Ahora el emprendimiento seguía el curso que Dios estaba disponiendo para la Plataforma Escolar llamada Scool 4.0 con aplicación móvil. Eso definitivamente era también la respuesta a mis oraciones de meses atrás.
Dios aceleró el proceso, ya que 4 días después de terminado el curso finalizó el desarrollo y la mayoría de pruebas dentro de la plataforma y 5 días después ya estaba autorizado en Play Store. Esa aceleración en forma sobrenatural lo había hecho Dios usando este curso y los coaches.
Y yo que sigo confiando en todo lo que Dios está preparando y lo que puedo concluir es que todo lo que aprendí de personas realmente profesionales y llenos de la Gracia de Dios, lo pude poner en práctica inmediatamente, el resto Mi Padre Celestial lo está haciendo y está abriendo grandes puertas.